La Motivación En Tu Dieta

Adelgazar puede ser una cuestión de Estética, de Salud o de ambas. La razón no bastará y la motivación fluctuará, debes conocer que esto es normal durante tu proceso de control de peso, para que cuando te ocurra “no tires la toalla” y actúes en consecuencia. Cuidarse vale la pena siempre, necesitarás constancia, determinación, el apoyo de un profesional experto y sobre todo que seas comprensivo contigo mismo.

Dice la psicología, que lo que nos mueve a hacer algo, no es un razonamiento sino la emoción que te puede hacer sentir dicho razonamiento o la situación. 

 

Ejemplo, 7 de enero, una persona, se sube a la báscula de su cuarto de baño después de su ducha matutina. Ha aumentado cinco kilos su peso respecto a la última vez que se pesó hace un par de meses. Ninguna sorpresa, era de esperar, demasiadas celebraciones pendientes de ser compensadas ,y desde que empezó el frío no le apetece ir al gimnasio. Emoción nula.

La misma persona ha quedado para cenar el sábado noche con un grupo de amigos y quiere verse bien, rebusca en su armario, pequeño, pequeño, pequeño, a ver si esto me vale, pequeño, pequeño, ¿pero cómo cabía yo aquí? ¡pues si que estaba yo bien antes!, a ver, sigamos, ¿este? Pequeño, pequeño, ¿y qué me pongo yo ahora? ¡no tengo nada que ponerme! Emociones: ansiedad, confusión, decepción, derrota, desesperación, fastidio, fracaso, frustración, furia, impotencia, infelicidad, inferioridad, insatisfacción, melancolía, pena, pereza, pesimismo, preocupación, rabia, rebeldía, resignación, tristeza, vulnerabilidad...así hasta la Z.

Cambiemos el listado de emociones. Las riendas de tu Vida están en tus manos. Sé quien quieras ser. Reinvéntate. Crea la versión mejorada de ti mismo. Llama a tu especialista de confianza pide cita, pero no para el lunes dentro de un mes cuando los astros están alineados después de la escapada a Roma y de la boda de segundas nupcias del cuñado de tu prima segunda la de Granada. Aquí y ahora, basta de lamentaciones y excusas, busquemos soluciones, tu puedes yo te ayudo, empieza tu dieta te mereces estar bien.

Primer paso dado, tienes tu dieta personalizada adaptada a tu vida social, y te dice tu médico además que es necesario comer una vez a la semana como tu familia o amigos, tu estrategia clara y definida para los próximos 7 días, metas cortas. 

 

Segunda visita a tu Médico Experto en Nutrición, has seguido las pautas y consejos, 5 comidas al día, has comprado materia prima de excelente calidad, tu pareja te dice que quiere comer como tú, comes más y mejor que antes. Duermes mejor, el sueño es más reparador, orinas cantidad, no vas estreñido, no pasas hambre, no tomas medicación ni te pinchan nada ni pierdes tiempo en aparatología inútil y costosa. Has retomado el gimnasio, vuelves a reencontrarte con tus amigos del gym, te saludan con una sonrisa, una palmada en la espalda y te preguntan qué tal estás. 

 

Te sientes ágil, vital y menos pesado, con fuerza y ganas de afrontar el día. Te lo notas en el volumen, la ropa más holgada, deshinchado, Tu especialista te confirma en la medición de tu composición corporal que HAS PERDIDO GRASA, has adelgazado, sin perder agua porque te has hidratado bien a pesar de orinar más, y sin perder masa muscular para que cuando acabes tu dieta no recuperes el peso perdido.

¡Enhorabuena! siéntete bien orgullo y contento. Orgulloso de tí mismo, pues debes seguir haciendo lo que has hecho y contento con el resultado. Emociones: admiración, afecto, agradecimiento, alegría, alivio, amabilidad, amor, apego, apoyo, armonía, benevolencia, bondad, calma, cariño, comprensión, compromiso, concentración, confianza, contento, cuidado, deseo, dicha, dignidad, estima, entusiasmo, esperanza, felicidad, fortaleza, gozo, ilusión, justicia, libertad, MOTIVACIÓN…orgullo, paciencia, paz, placer, plenitud, regocijo, respeto, satisfacción, seguridad, serenidad, sosiego, tranquilidad, unidad… y así hasta la Z.

Elige tu emoción y mantén tu motivación.

Saludos desde el Mediterráneo. Dra. Eva Alcaraz.