Tu Vida Sin Ansiedad Ni Estrés

¿Se puede vivir sin ansiedad ni estrés en la sociedad actual en nuestro día a día? 

MENTIRA. 

LO IMPORTANTE ES SENTIRTE QUERIDO Y APOYADO PARA QUE EL ESFUERZO MEREZCA LA PENA, Y DESEESTRESARTE PROPORCIONALMENTE A LO ESTRESADO. Cuando nuestro cuerpo y nuestra mente necesitan estar alerta en la resolución de situaciones a resolver: llevar a los niños al cole, llegar puntual al trabajo, llevar de manera exitosa la reunión de las 10:15a.m., cumplir con entusiasmo y rigor la dieta, esquivar los comentarios malintencionados de tu expareja, tu compañero de trabajo envidioso o trepa, por no hablar de si alguien sufre un jefe falto de autoestima que pretende cubrir sus carencias menospreciándote, tu vecina cotilla, hacer la compra, preparar los tuppers de comida para la semana, ayudar a los niños con sus tareas y deberes escolares, el fin de més, te recomiendo mantengas en orden tu casa y mandes a todos a la ducha, pero no sólo literal, sino también metafórico. 

 

Primero: Ordena tu mente simplificando y priorizando, el dos después del uno, cómo el equipo médico de urgencias que llevan sus protocolos de actuación. 

 

Segundo: Busca aliados reales para tu guerra, que te puedan ayudar con la logística, o qué menos, que anímicamente. 

Recuerda que tu buenos hábitos incluida tu alimentación son aliados imprescindibles. Comer además de nutrirnos, constituye uno de los actos mediante los cuales interactuamos con nuestra microbiota. Dicen los expertos que el futuro de la medicina será la interacción de los genes con la combinación de bacterias, beneficiosas o no, que configuren nuestra microbiota, especialmente la intestinal (antes conocida como flora digestiva). Dieta, dieta, dieta. ¿Eco? Si puedes sí.

Tercero, e igual de importante: Respira y recupera la Paz, el Sosiego y la Calma del “dulce no hacer nada”, sintiendo tu cuerpo y tu mente con introspección, identificando tus emociones y sensaciones reales, sea con meditación, actividad física, masajes o haciendo aquello que identifica, y te hace sentir tu mismo como leer, escuchar música, viajar, pero sobre todo comparte tu Vida con quienes quieres, te quieren y te hacen sentir digno de Amor. “La Vida es mejor de lo que pensamos” (Eva Alcaraz).

 

Tú eres un castillo, grande, fuerte, la mayor parte de las veces, y además lo has sido mucho tiempo. De hecho, aquí permaneces como un castillo medieval o reinventándote, la vida son etapas. Grandes conflictos y situaciones difíciles seguro has vencido a lo largo de tu historia, con éxito en el pasado, y vas a seguir haciéndolo en el presente, sean las mismas u otras nuevas que te encontrarás sin duda. Sin embargo, aquí estás, ocupando el lugar que quieras darte: cálido, acogedor y confortable para los tuyos, firme en tus objetivos para lograr alcanzarlos, y con la mente fría como roca de resiste las inclemencias de la muralla que protege tu castillo. En el siglo XXI y en la sociedad moderna no bastará que te digan “no te estreses” o “lo que debes hacer es descansar”. ¿Cómo no te vas a estresar?, necesitas que tu cuerpo libere adrenalina para huir del peligro o enfrentarte a él, debes resolver la situación que te causa el estrés, ¿Descansar ahora? ¡justo ahora que necesito mantener mi actividad cerebral y física para solucionar el problema!. ¿Indignante verdad?, te lo dirán con la mejor intención, pero agrava sin querer la situación en la que te encuentras en el momento presente. Lo que necesitas es que te apoyen las personas de tu micromundo, te ayuden a recordar y hacerte sentir que tú puedes, confío en tí, yo te ayudo, juntos podemos. Como siempre opino muchos malentendidos interpersonales podrían resolverse caminando de la mano, con un abrazo y sincero “te quiero cariño”.

 

 Mientras resuelves los conflictos es necesario que tú también te quieras y te cuides (Consulta: Quiérete Con La Vida Del Bebé). Si tu pareja te comprende estás de enhorabuena, pero si no tienes pareja actual o no te sientes sólo, firma un armisticio contigo mismo, come sano y que tu sueño sea reparador, tú eres tu mejor aliado, y seguro tienes más apoyos de lo que crees cuando estás positivo que negativo, o más de los que imaginas si dejas de replegarte sobre tí mismo y autocompadecerte. Aún no han inventado “el poder comprar horas al día”, disponemos de 24 horas cada día, cada uno de nosotros, que suman en total 168 horas a la semana. Quizá hoy de estas 24 horas, no puedas dedicar alguna de ellas a disfrutar de tu vida, en soledad o en compañía, de lo que te hace crecer y sentirte bien contigo mismo y los demás, pero ¿y en las 144 horas restantes?. Treinta días son 720 horas y los trescientos sesenta y cinco días al año 8.760 horas. ¿Has pensado ya qué hacer en tu tiempo libre, cómo te quieres sentir y con quien quieres estar?. Hoy amanece un nuevo día...

Mis disculpas a quienes he herido alguna vez. Mi agradecimento a quienes desean formar parte de mi vida.

Saludos desde el Mediterráneo. Dra Eva Alcaraz.