Las
dietas vegetarianas adecuadamente planificadas (y suplementadas)
pueden ser saludables, con efecto beneficioso en la prevención y
tratamiento de ciertas enfermedades (cardiopatías, dislipemias,
diabetes, cáncer y algunos trastornos intestinales.
Si
por opción de Vida deseas eligir una alimentación Vegetariana o
incluso Vegana, implica una responsabilidad muy grande no solo hacia
la Naturaleza y los animales sino también hacia tí mismo. Pues, es
imprescindible asesoramiento sobre proteínas, hierro, omega 3, zinc,
calcio, vitamina D y vitamina B12 entre otras.
La
Medicina no es una ciencia exacta y no desesperes si a veces los
criterios médicos no coinciden sobre la misma situación. Seamos
prácticos: si padeces una o varias carencias nutricionales
ocasionadas, entre otros posibles factores, por tu alimentación,
habrá que rectificar, tratar, marcar nuevas estrategias y
estabilizar el resultado. Ahora bien, si tus chequeos de Salud son
óptimos el significado es diferente.
Se
presenta en la alimentación vegetariana, y aún más en la vegana,
el siguiente razonamiento: Cuando la alimentación es menos
diversificada, comemos más de un mismo alimento para saciarnos. Si
comes más de un alimento, tipo de alimento o nutriente; aumentas los
efectos beneficiosos de éste pero cuidado porque también aumentas
los posibles efectos perjudiciales que el mismo pudiera ocasionar.
Como puede ocurrir con la bollería industrial y el aceite de palma
en los celíacos (consulta: Comer Sin Gluten).
Dentro
de la dieta vegetariana,hay distintas opciones. La dieta vegetariana
estricta (veganismo) excluye cualquier tipo de carnes y productos
animales, descartando no solo carnes rojas sino también las blancas
como el pollo, tampoco incluye huevo, lácteos, manteca, gelatina de
pescado y miel de abeja. La dieta lactovegetariana sí incluye los
lácteos, y la lactovegetariana además de lácteos también los
huevos.
El
consumo de fibra naturalmente incluida en frutas, verduras y cereales
previene el estreñimiento y el cáncer de colón. También ralentiza
la absorción de los azucares que se liberan de la digestión de los
alimentos con lo que es beneficiosa para evitar subidas bruscas de
azúcar en sangre que son perjudiciales para el diabético y para la
tendencia a engordar.
Sin
embargo, he atendido en consulta pacientes vegetarianos con sobrepeso
por un alto consumo en harinas y azúcares simples. Así como un
exceso de fibra puede impedir parte de la absorción de omega 3,
hierro y vitaminas.
Al
excluir los productos de origen animal se excluye la mayor fuente de
vitamina B12 incluida en la Alimentación. Y al descartar pescados y
lácteos las más importantes de calcio y vitamina D. Sésamo,
almendras y tubérculos son alimentos a considerar en la dieta
vegana.
El
crudiveganismo consiste en una dieta basada en los vegetales sin
procesado ni cocinado al menos en un 75%. Para este tipo variante de
vegano será fundamental técnicas específicas tratar los alimentos
y mejorar su digestibilidad como germinar las semillas, exprimir
frutas y otros vegetales y poner a remojo los frutos secos.
Valorando
las observaciones anteriores una dieta vegetariana supone
diversificar al máximo ingestas y combinar adecuadamente dentro de
tu opción de alimentación, para un mejor y buen aprovechamiento de
nutrientes.
Quiérete
y cuídate sea con la Dieta Mediterránea o con la Dieta Vegetariana.
Dra.
Eva Alcaraz.
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