Memoria y Concentración

Contaros sobre la memoria es largo, complejo, y puede hasta que se me olvide. Es broma. Pero, si hay algo que requiere la memoria, es estar concentrado en cada momento en lo que estamos haciendo, para, luego facilitar ordenar los pensamientos, y poder recordarlo. Llegas a casa, abres la puerta y mientras entras, estás pensando qué hora es, y qué día de la semana es hoy, por si debes ir a recoger, en apenas un rato, a tu hijo al colegio, o si te dá tiempo a comer sentado, porque hoy van a por él los abuelos, canguro o expareja, porque el niño tiene determinada extraescolar. ¿Dónde están las llaves? Ni idea, salvo que las dejes por rutina beneficiosa en el mismo sitio, como en el mueble de la entrada, o puestas por dentro para verlas (aunque tiene sus riesgos), o estés pensando dejo las llaves en el bolso hoy aquí, y ahí están para luego no dejarlas dentro de casa cuando vuelva a salir con prisas. Concentrarse en dónde estás y qué haces, te ayudará a recordar, independientemente de otros factores más graves, que obviamente pueden sumarse como el deterioro cognitivo, cuando este aparece.

Viéndolo en positivo ¿qué puedes hacer hoy por preservar la memoria o minimizar la perdida cognitiva en lo que de ti dependa?. Como cualquier función orgánica la memoria puede beneficiarse de una alimentación sana y variada, como a mí me gusta llamarla, una “Alimentación Apropiada”. Comida natural, casera, a fuego lento, con cariño como ingrediente secreto, rica en fibra, antioxidantes y grasas cardiosaludables, entre el resto de vitaminas, proteínas necesarias de alta calidad biológica e hidratos de carbono en función de la actividad física practicada. Planifica tus menús, procura que sean variados, infórmate sobre el antienvejecimiento y los antioxidantes (Consulta: Con la Astaxantina no te oxidas), así como el papel de la inflamación en la enfermedad y procesos degenerativos, y por último pero quizá la parte más importante, los estudios que están investigando en los últimos años sobre el papel de la microbiota. Dos kilos de nuestro peso total de adulto, lo constituyen la combinación de bacterias que a lo largo de la vida, comida y circunstancias configuran nuestra microbiota, que en conjunción con nuestro carga genética, parece puede ser determinante para la memoria y prevención de muchas enfermedades (Consulta: La microbiota y el microbioma).

Respecto a la memoria y el sueño, encontrarás también artículos que relacionan la duración de la fase no R.E.M. del sueño con un papel protector frente al deterioro cognitivo. Es decir, hasta ahora decíamos que lo importante, no era si duermes muchas horas o pocas, sino si te despiertas con la sensación de que el sueño ha sido reparador. Se menosprecia, o menospreciaba, esta segunda fase del sueño que se ve reducida al dormir menos horas. Es cierto que los niños necesitan dormir más horas que los adultos, empecemos a hacerlo bien con los menores de la familia, pero tú como adulto si puedes dormir una hora más, mi consejo es, házlo. Ya sabes eso de, tan necesario es dormir como el comer. Dormir, es como una especie de meditación donde nuestro organismo “se concentra” sobre sí mismo, y se facilitan los procesos regenerativos.

Si tu, o un familiar, empieza a manifestar síntomas de pérdida de memoria, trabaja tu concentración, mejora tus ingestas y tu calidad de sueño, pero acude sin falta a consultar a tu médico de familia para que se pueda detectar si un efecto secundario de una medicación puede estar influyendo, si el estado cardiovascular es correcto, así como posibles causas neurológicas que tratarán con los conocimientos actuales los especialistas que correspondan. Y cuando se confirma que el daño existe, la aceptación, y el vivir sacándole el máximo partido al día a día, que no te lo roben ni tu falta de memoria, ni la de tus seres queridos. El sufrimiento existe, pero la Felicidad también, y a veces caminan juntos. Sonríe, por favor.

Quiérete y cuídate, disfrutando cada minuto con concentración e intensidad.

Saludos desde el Mediterráneo y la Ciudad de las Ciencias.

Dra Eva Alcaraz.

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