El Desayuno Correcto

Ni garbanzos ni galletas industriales para desayunar. En el niño. leche de cabra u oveja, tostadas de pan de horno con tomate restregado, y aceite de oliva virgen extra. En el adulto café con leche y pan integral o multicereales elaborado con masa madre, aderezado con aceite de oliva virgen extra, rodaja de tomate y jamón, queso fresco o atún.




Desayunar garbanzos es una opción sana en un individuo que haga ejercicio físico habitual, como puede ser un niño. Sin embargo, al salirnos de un modo tan extremo de la norma, sin querer, podemos automarginar a ese niño: ¿qué desayunará ese niño cuando vaya de excursión y se quede a dormir con sus compañeros en el albergue?. Yo recomiendo, como médico experto en nutrición, la opción mejorada del desayuno standard de la población, según culturas y rango de edad.




Desayunar galletas industriales a diario, desequilibra el aporte óptimo de nutrientes saludables. El niño debe saber que es la excepción y qué es la norma. Siempre que esas galletas sean en desayuno, almuerzo o merienda puedan ser caseras será mucho mejor pues podemos controlar las cantidades y la materia prima con las que las deseamos elaborar. 


 

Para las galletas de mantequilla se usa de mitad de peso de harina en peso de mantequilla a incluir, piense pues, si su salud y la de los suyos pueden permitirse esa cantidad. Si así fuera, al menos la mantequilla aportará vitamina D. También podemos usar aceite de oliva, ralladura de naranja, de limón, canela, panela, miel, harinas integrales, harinas de cereales varios, algarroba molida o cacao en polvo puro (no sucedáneos).




El desayuno correcto tanto en niños como en adultos debería ser abundante y suponer el 20% de las calorías totales del día. Este debe incluir tres partes diferenciadas: proteínas, carbohidratos y grasas sanas. Sugerencias para la parte proteica son leche de oveja o cabra, yogures biológicos, quesos con leche de garantía sanitaria, jamón curado de poder ser ibérico, pescados azules como atún, o huevos de gallinas felices alimentadas con pienso o granos ecológicos.




Los carbohidratos pueden ser pan fresco de horno de trigo con harina blanca o integral, centeno, copos de avena, muesli para los muy deportistas, o fibra para los más sedentarios. Las grasas sanas como frutos secos, tocino de cerdo ibérico alimentado con bellotas, aceite de oliva virgen extra (ácidos grasos monoinsaturados) o pescados (grasa poliinsaturada poliinsaturados). Importante también considerar que el tomate natural en la tostada o el zumo de naranja natural, aportará vitamina C como antioxidante y fibra para un transito intestinal idóneo.




Debemos ser conscientes que la obesidad en el adulto en España supone un 20% de la población, y en niños un 19%. Esta cifra ha aumentado en las ultimas décadas y es necesario concienciarse para cuidarse adecuadamente con convicción, a tí y a los tuyos.




Infórmate, come sano, y continúa queriéndote y cuidándote, como cuididas a quienes quieres. 
  
Dra. Eva Alcaraz.


Comentarios