Cuando
nos compramos una casa o un coche, valoramos nuestras necesidades
personales o familiares, y nuestras posibilidades, y eso es
exactamente lo que te recomiendo hagas con tu alimentación, debes
conocer cuales son tus necesidades reales de nutrientes, vitaminas,
minerales, oligoelementos, antioxidantes para evitar comer por modas,
compulsión, marketing, o sencillamente desinformado. Vivimos en la
Era de la Información. Asesórate con un médico experto con
criterio, que personalice tu alimentación en función de tus
necesidades reales, tus objetivos, tus gustos, tu actividad
deportiva, y respetando tu Vida Social y Familiar.
La
edad condiciona los requerimientos nutricionales. En la primera mitad
del embarazo el bebé demanda más hierro, en la segunda más calcio.
El calcio se acumulamos se produce en los treinta primeros años de
vida, el resto es sólo para reponer pérdidas. Un niño requiere más
grasa que un adulto, está en crecimiento formando sus órganos
vitales, pero en general será más activo que de adulto, salvo que
comprenda la importancia del ejercicio físico y lo incorpore
habitualmente a sus rutinas beneficiosas de adulto. A partir de los
50 años de vida los cambios hormonales condicionarán tus
requerimientos por muchos factores.
Es
evidente el esfuerzo que los padres hacen con sus hijos: que coman a
su hora y lo que tienen que comer, que duerman a su hora y lo que
tienen que dormir, y que beban agua, que estén bien hidratados. Y
ese esfuerzo es porque saben que es lo mejor para ellos. Estas
necesidades son igual de importantes en los adultos, y quererse y
cuidarse, es atenderlas del mismo modo que lo hacemos en los primeros
años de Vida de nuestros hijos. Lo natural es comer con regularidad
cada cierto tiempo, los padres lo sabemos bien, los bebés son
“relojitos”, puntualmente llorarán para pedir comida cada 2-3
horas. Come regularmente pero en función de tus necesidades de
adulto, posibles enfermedades, sedentarismo o no.
Ser
hombre o mujer biológicamente es diferente, y marca necesidades con
algunas variantes como son las necesidades de hierro en mujer en edad
fértil. El metabolismo de las grasas y proteinas también estará
condicionado en función de las hormonas masculinas o femeninas.
Existen ya en el mercado complementos vitaminicos y nutricionales que
atienden a estas diferencias en minerales y oligoelementos. En el
caso de una mujer joven, deportista en edad fértil, las necesidades
de hierro aumentan por tres causas diferentes y es prototipo de
persona con tendencia a la anemia.
Las
diferentes enfermedades y su tratamiento dietético condicionará la
ingesta abundante, reducida, o execta de determinados alimentos.
Hipertensión, colesterol elevado, triglicéridos elevados, diabetes,
ácido úrico elevado, apneas, ronquidos, enfermedad cardiovascular
entre muchos otros se benefician de una alimentación apropiada.
Comer adecuado forma parte de la Cultura del Bienestar. Tu
alimentación puede mejorar determinadas carencias o incluso frenar
la evolución de muchas enfermedades ya conocidas. Tu comida es
medicina natural.
El
deporte o la actividad física pueden marcar diferencias
considerables en función del tipo de la actividad practicada, el
tiempo de entrenamiento, la intensidad del ejercicio físico, la
competición y la regularidad de la práctica. El ejercicio físico
confiere libertad para comer, lo cual es especialmente ventajoso en
personas que les cuesta o no les apetece controlar su alimentación
con una dieta específica. El deporte en sí mismo, aumenta la
necesidad de calorías totales ingeridas. Más ejercicio, más
cantidad de comida. Las personas sedentarias deberán llenar ese
espacio con abundantes alimentos de baja densidad calórica.
El
deporte dependiendo de si requiere una energía explosiva o de si se
prolonga en el tiempo más de dos horas consecutivas requerirá más
hidratos de carbono y menos grasas, o por contra más hidratos de
carbono pero con más grasas. Entrenar un par de horas a la semana
puede no modificar apenas tus necesidades reales de alimentación,
pero sin duda aunque parezca poco, ya entras en la rueda positiva de
quererte y cuidarte.
Uno
de mis mejores consejos. es siempre y para todos, es que debe
predominar la materia prima diversificada y natural, de la mayor
calidad que puedas permitirte comer. Es básico disfrutar con la
alimentación, es un placer de la Vida, no necesitas sumar calorías
y nutrientes, y comer como un astrónauta en pleno vuelo espacial.
Nuestro organismo de momento es natural y no biónico, requiere
productos en armonía con tu Naturaleza. Alimentar las bacterias
buenas simbióticas con nuestro organismo, puede definir nuestra
Salud y Calidad de Vida en el presente y futuro.
Tal
vez tu Vida Social es muy activa, y elegir qué comes, se vé
condicionado, pero siempre, puedes escoger el mal menor para
llevártelo a tu terreno en función de tu objetivo Salud, o de tu
objetivo peso o masa corporal. Comer de tupper implica saber qué
alimentos pones dentro: comida variada y los nutrientes en
proporciones correctas. Un quitahambre, no es nutrirse. Combinar los
alimentos puede desaprovechar nutrientes: el hierro de la carne y
calcio del queso compiten en su absorción, pero el pescado azul
facilita la absorción del calcio. Las galletas integrales impiden
parte de la absorción del hierro del chocolate ¿qué te parece el
chocolate mejor con pan casero de horno?.
Partiendo
de la Dieta Mediterránea conocer qué alimentos son ricos en fibra,
en cuales predomínan más los hidratos de carbono, proteínas o las
grasas; cuales son las proteínas de alto valor biológico; qué
alimentos son ricos en omega 3, qué son las gasas saturadas, donde
se encuentran las mono y poliinsaturadas; qué vitaminas pueden
aumentar sus demandas y cuándo, dónde se encuentran las vitaminas
hidrosolubles y las liposolubles; ingerir a menudo antioxidantes
naturales; cómo cuidar nuestra microbiota, de dónde proceden los
alimentos que compramos... Personaliza tu Vida, personaliza tu dieta.
Saludos
desde el Mediterráneo.
Quiérete y cuídate con lo que de Verdad es lo mejor para ti.
Dra. Eva Alcaraz.
Quiérete y cuídate con lo que de Verdad es lo mejor para ti.
Dra. Eva Alcaraz.
Comentarios
Publicar un comentario