Organízate, Prioriza y Come Natural

Tu cuerpo es natural, necesita y le benefician, los productos naturales. Alimentación Mediterránea: fruta natural, verdura de temporada a poder ser ecológica, pescados salvajes de lonja, aceite de oliva virgen extra sin filtrar, huevos de gallinas que comen natural y en libertad, carne al corte que se oxida y no mengua su tamaño en la satén, alimentos que son propios de tu lugar de orígen, para los que tu cuerpo antropológicamente está preparado, como leche de cabra y oveja en las regiones del Mediterráneo. ¿Apetecible?. Lo es, y además es lo natural y apropiado para preservar una óptima microbiota, y que tu salud digestiva vele por tu Salud General.




La naturaleza es sabia, y pone a nuestra disposición los alimentos que necesitamos en la época del año que más los necesitamos. No es una casualidad que la fruta de verano sea la más rica en agua, como la sandía, y en otoño e invierno, naranjas y fresas ricas en vitamina C. Incluso cada alimento en su composición está diseñado para el aprovechamiento de sus nutrientes. El consumo de carne nos aporta hierro, y las proteínas facilitan la absorción del hierro, ¿otra casualidad? No lo parece. Igualmente alimentos ricos en triptófano contienen magnesio y vitamina B6 (piridoxina) que facilitan la función del primero. El triptófano es aminoácido esencial aportado por la alimentación, precursor de la serotonina, de la melatonina y de la vitamina B3 (niacina) con lo que interviene en el estado anímico y en el sueño. Come, duerme, hidrátate (consulta: Quiérete Con La Vida Del Bebé).




Los platos tradicionales nos aportan la variedad y equilibrio de nutrientes, vitaminas, antioxidantes, fibra, transmitidos por años y siglos de experciencia y elaborados con los alimentos disponibles por climatólogía y orografía del lugar en cuestión. Todas y cada una de las culturas gastronómicas tradicionales son correctas. En el norte de China los hidratos de carbono los aporta el trigo, en el sur es el arroz. En culturas con menos de proteína animal combinan las legumbres con cereal para mayor aprovechamiento de los aninoácidos. Pero ya en el estudio de los Siete Paises la Dieta Mediterránea brilló por su estadísticamente significativa ventaja de prevención de riesgo cardiovascular, y está incluida por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad (consulta: La Dieta Mediterránea). Es Valencia una ciudad privilegiada, junto con el resto de las de países con este tipo de alimentación: huerta con frutas y verduras los 365 días del año, ricas en fibra que previene el cáncer de colón y vitamina C con efecto antioxidante; alimentos procedentes del mar ricos en omega 3, vitamina D y calcio, o la gamba roja rica en astaxantina aún más potente antioxidante; alimentos de granja como carnes, ricas en proteinas, hierro y vitaminas del grupo B.




Ningún alimento es bueno para todo, tu alimentación correcta se basa en el conjunto de la alimentación, el equilibrio entre todos los nutrientes. La fibra es buena pero un exceso dificultaría la absorción de algunas vitaminas, nutrientes o minerales y oligoelementos. Tuve un caso de una paciente con el colesterol elevado porque comía siempre hígado en vez de carne porque le dijeron que era bueno para el hierro. En cuanto equilibramos su alimentación, conseguimos regular sus cifras de hierro, ferritina y hemoglobina, y sobre todo las del colesterol total, HDL colesterol y LDL colesterol. Variedad, naturalidad y equilibrio.




Dando por sentada la cuestión onírica, pues naturalmente prefiero tomates del Perelló o de la huerta Murciana con aceite virgen extra ecológico no filtrado de los olivos de la familia, y a continuación un plato de paella valenciana cocinada con leña de naranjo, que el comer un “quitahambres”, aunque sea equilibrado a modo de comida de astronáutas. Recordaré la línea de investigación científica que se lleva a cabo hoy en día sobre la microbiota y la Salud. La dieta es el mejor probiótico. Si de los 5 quintillones de bacterias en el mundo, sólo el 0,006 son patógenas, usemos las bacterias “buenas” en nuestro beneficio. Como la gorila que quiere curar a su bebé gorila transmitiéndole bacterias de la tierra. (consulta: La Microbiota y El Microbioma). Lo que sí te recomendaré con la información actual es que dentro de tus gustos de alimentación, tu estilo de Vida, comas lo más variado posible, para un aporte completo y natural de nutrientes, y sobre todo para alimentar a tus bacterias “buenas” que cada vez más conocemos velan por nuestra Salud. No alimentes al lobo, vive y come en armonía con tu cuerpo, con la Naturaleza.




Los suplementos nutricionales deben estar supervisados y pautados por un especialista en Salud que valore tu necesidad extra por motivos de malabsorción intestinal, alguna enfermedad que se beneficie de un aporte extra de alguna vitamina u antioxidantes. Una alimentación natural variada no requiere por sí misma de suplementación nutricional. Estrés, una vida agitada, pero nunca como excusa de no comer lo que debes. Si no puedes comer lo que te conviene, un suplemento no debe ser la excusa para seguir haciéndolo mal, vale la pena organizarse y priorizar. Toma vitaminas o suplementos extras porque comas sano y requieras un “plus” eso sí, pero nunca para no tener que esforzarte en comer bien. Hay estudios que demostraron que los aportes exógenos de fibra no producían el efecto beneficioso de protección frente al cáncer de colon como la fibra naturalmente ingerida con el alimento completo. Otro factor es el hecho del orígen de las vitaminas o nutrientes que ingerimos como suplementación, infórmate sobre la procedencia, puede ser ecológico o no, natural o síntético. La astaxantina de microalga es un potente antioxidante, la sintética no es beneficiosa. El colágeno puede estar en un guiso de pollo o pescado casero o puedes tomarlo en comprimidos procedente de manitas de cerdo o de restos de pescado. Tu eliges. 


 

Si no tienes tiempo de cocinar cada día, congela con tuppers libres en bisfenol A para luego poder calentarlos, se pierde ácido fólico, pero otras vitaminas y nutrientes permanecen, y al menos es natural, lo has hecho tu con lo que sabes te beneficia, inviertes en Salud en función de tu convicción y posibilidades. Congela también en botes de cristal en raciones individuales, te será de más fácil manejo. Puedes servirte de alguna conserva de vegetales de tu despensa, si tu nevera está vacía. Compra por internet, planifica tus menús semanales con antelación para no quedarte sin nada, esto lo harás una vez, luego tu lista de la compra ya está hecha, es cuestión de repetirla. por ejemplo cada dos semanas. La cocina también es divertida, comparte tiempo con tus seres queridos cocinando juntos y sintiendo la satisfacción del trabajo bien hecho y el placer de comer lo elaborado por vosotros. Transmite a tus hijos la importancia del comer sano, es una de las mejores herencias. Rescata las recetas de la mamá o de la abuela. Comer sano, natural y apropiado es una cuestión de organización y prioridad.




Saludos desde el Mediterráneo. 

Quiérete y cuídate con lo que de Verdad es lo mejor para ti.  

Dra. Eva Alcaraz.


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