El
ciclismo junto con la natación y el atletismo, es uno de los
deportes más completos. La duración prolongada en las salidas con
la bicicleta, facilita quemar muchas calorías y quemar grasas. La
velocidad óptima en la que es más que un mero paseo, y no exista un
riesgo cardiovascular, debe ser personalizada en función de las
pulsaciones cardíacas. Es como el ritmo aeróbico del footing.
Una
hora de bicicleta en un entorno natural puede ser muy agradable,
según el recorrido realizado. El sonido de los pájaros, el rumor
del agua, la brisa fresca, el paisaje diferente en cada momento.
Muchas ciudades también están adaptándose para facilitar el uso de
la bicicleta como medio de transporte sano y ecológico. Es
imprescindible recordar, la importancia del respeto mutuo, en la
convivencia y seguridad vial entre peatones, ciclistas y vehículos
de motor. Una observación interesante, es que cuando circulamos en
bicicleta, la inercia del movimiento, puede ser un factor
multiplicador de riesgo en un accidente, respecto a la capacidad de
reacción de un peatón cuando debe echar un pie atrás, para no ser
atropellado por un coche, por ejemplo.
La
práctica del ciclismo, es atractiva para personas que les gusta la
velocidad y ejercitarse físicamente. Según modalidades, puedes
rodar entre 15 y 25km/ hora en bicicleta de montaña, excepto alta
montaña o bajadas; y entre 25- 35Km/ hora de media en bicicleta de
carretera. En las Grandes Vueltas Ciclistas, la media puede estar en
torno 40km/ hora. Como otros deportes, requiere disciplina y espíritu
de sacrificio, una buena hidratación y una alimentación sana
apropiada.
Si
estás iniciándote en esta disciplina, es motivador ver progresos en
la velocidad media, en el desarrollo muscular de las piernas, y en tu
estado de Salud en general. Lo bueno de la bici, es que en la
práctica regular, en 5- 6 semanas puedes empezar a notar los
resultados, respecto a otros tipos de entrenamientos. Si te gusta lo
que haces, deseas seguir haciéndolo, y entras en la rueda positiva
de cuidar tu Salud, tu alimentación y estar en contacto con la
Naturaleza.
Los
detalles técnicos de la bici, los reglajes de la misma, y una óptima
alimentación pueden mejorar tu rendimiento. Si tu espíritu
competitivo es alto, un asesoramiento nutricional, es necesario. Los
tiempos y frecuencia de entrenamiento, junto con la condición física
personal, deben ser valorados por tu profesional experto en nutrición
deportiva, para estructurar tu alimentación y valorar la idoniedad
de suplementación, por ejemplo en antioxidantes como la astaxantina
que pueden ayudarte en la recuperación deportiva y en la prevención
a nivel de Salud (consulta: Con La Astaxantina No Te Oxidas).
Quiérete
y cuídate con La Dieta Mediterránea y ejercicio físico.
Saludos desde el Mediterráneo.
Dra Eva Alcaraz.
Dra Eva Alcaraz.
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